REPÚBLICA DE CHILE
DIARIO DE SESIONES DEL SENADO
PUBLICACIÓN OFICIAL
LEGISLATURA 369ª
Sesión 78ª, en martes 28 de septiembre de 2021
Especial
(Celebrada presencial y telemáticamente, de 12:16 a 14:29)
PRESIDENCIA DE SEÑORA XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ, PRESIDENTA,
Y SEÑOR JORGE PIZARRO SOTO, VICEPRESIDENTE
SECRETARIO, EL SEÑOR RAÚL GUZMÁN URIBE, TITULAR
____________________
VERSIÓN TAQUIGRÁFICA
Asistieron presencialmente las señoras y los señores:
--Aravena Acuña, Carmen Gloria
--Araya Guerrero, Pedro
--Bianchi Chelech, Carlos
--Carvajal Ambiado, Loreto
--Castro Prieto, Juan
--Chahuán Chahuán, Francisco
--Coloma Correa, Juan Antonio
--Ebensperger Orrego, Luz
--Elizalde Soto, Álvaro
--Galilea Vial, Rodrigo
--Girardi Lavín, Guido
--Guillier Álvarez, Alejandro
--Insulza Salinas, José Miguel
--Kast Sommerhoff, Felipe
--Latorre Riveros, Juan Ignacio
--Montes Cisternas, Carlos
--Moreira Barros, Iván
--Navarro Brain, Alejandro
--Pizarro Soto, Jorge
--Prohens Espinosa, Rafael
--Quinteros Lara, Rabindranath
--Rincón González, Ximena
--Sandoval Plaza, David
--Van Rysselberghe Herrera, Jacqueline
--Von Baer Jahn, Ena
Asistieron telemáticamente las señoras y los señores:
--Allende Bussi, Isabel
--De Urresti Longton, Alfonso
--Durana Semir, José Miguel
--García-Huidobro Sanfuentes, Alejandro
--Lagos Weber, Ricardo
--Órdenes Neira, Ximena
--Ossandón Irarrázabal, Manuel José
--Provoste Campillay, Yasna
--Pugh Olavarría, Kenneth
--Quintana Leal, Jaime
--Soria Quiroga, Jorge
Concurrieron, además, presencialmente, el Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante, señor Juan Francisco Galli Basili, y telemáticamente, las Ministras de Relaciones Exteriores subrogante, señora Carolina Valdivia Torres, y de Desarrollo Social y Familia, señora Karla Rubilar Barahona.
Asimismo, se encontraban telemáticamente la Subsecretaria de la Niñez, señora Blanquita Honorato Lira; el Embajador Director de Asuntos Consulares de la Cancillería de Chile, señor Julio Fiol Zúñiga, y el Director de Incidencia del Servicio Jesuita a Migrantes, señor Carlos Figueroa Salazar.
Actuó de Secretario General el señor Raúl Guzmán Uribe, y de Prosecretario, el señor Roberto Bustos Latorre.
II. APERTURA DE LA SESIÓN
--Se abrió la sesión a las 12:16, en presencia de 15 señoras Senadoras y señores Senadores.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión.
ANÁLISIS DE CRISIS MIGRATORIA EN EL NORTE DE CHILE
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Señor Secretario, tiene la palabra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).-
Gracias, señora Presidenta.
Buenos días.
Como se indicó en la circular N° 290/SEC, la señora Presidenta del Senado citó a sesión especial el día de hoy, de 12 a 14 horas, con la finalidad de analizar la crisis migratoria en el norte de Chile.
A esta sesión se invitó al señor Ministro del Interior y Seguridad Pública, al señor Ministro de Relaciones Exteriores, a la señora Ministra de Desarrollo Social y Familia, al señor Director de Incidencia del Servicio Jesuita a Migrantes, a la señora Subsecretaria de la Niñez.
Han confirmado su asistencia el señor Juan Francisco Galli, Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante; la señora Carolina Valdivia, Ministra de Relaciones Exteriores subrogante, quien participará de manera remota o telemática; la señora Karla Rubilar, Ministra de Desarrollo Social, quien también participará de forma telemática; la señora Blanquita Honorato, Subsecretaria de la Niñez, que participará de manera remota o telemática; el señor Julio Fiol, Embajador Director de Asuntos Consulares de la Cancillería de Chile, de forma telemática; el señor Carlos Figueroa, Director de Incidencia del Servicio Jesuita a Migrantes, quien participará de manera telemática y concurre en reemplazo de la señora Valeska Ureta, Directora Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes.
Se han excusado y no asisten el señor Rodrigo Delgado, Vicepresidente de la República, quien será reemplazado por el Ministro del Interior subrogante, presente en la Sala; el señor Andrés Allamand, Ministro de Relaciones Exteriores, quien se encuentra fuera del país en viaje oficial y será reemplazado por la Ministra de Relaciones Exteriores subrogante, ya individualizada, y el señor Juan Carlos Murillo, Representante Regional de la Oficina del Acnur para el sur de América Latina.
Es todo, señora Presidenta.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Muchas gracias, señor Secretario.
Les damos la bienvenida a todos nuestros invitados e invitadas.
La verdad es que era tremendamente importante efectuar esta sesión especial. La migración es un desafío que como país tenemos que enfrentar y lo debemos hacer con criterios humanitarios. Este es un fenómeno complejo, que nos obliga a todas y a todos, a los actores políticos nacionales, a los gobiernos extranjeros, a los organismos internacionales. Y creo, queridas y queridos colegas, que debemos ser capaces de buscar soluciones integrales que atiendan efectivamente y de manera humanitaria a esta crisis migratoria.
Los principales responsables de la situación que acontece son, sin lugar a duda, los actores políticos que nos han puesto en este escenario.
El llamado que hicimos el día de ayer respecto de este tema, como Mesa del Senado y con diversos colegas, hoy día lo queremos debatir acá, con todas y con todos, para buscar entre todas y todos una solución, un camino, una propuesta.
La actual Constitución de nuestro país, en su artículo 5°, señala: "El ejercicio de la soberanía reconoce como limitación el respeto a los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana. Es deber de los órganos del Estado respetar y promover tales derechos, garantizados por esta Constitución, así como por los tratados internacionales ratificados por Chile y que se encuentren vigentes.".
Y por ello el debate en este Parlamento. Por ello abrimos este espacio en esta sesión especial para que conversemos sobre un tema que nos atañe y que como Parlamento y como Senado debemos tener a la vista, de acuerdo con lo consignado en nuestra Carta Magna, teniendo siempre presente y en primer lugar a la persona humana, a la cual debemos poner en nuestro centro de acción, promoviendo el bien común, creando condiciones para que todas y todos se sientan amparados.
Y permítanme reflejar esto en el artículo 6° de nuestra Carta Fundamental, que dice: "Los órganos del Estado deben someter su acción a la Constitución y a las normas dictadas conforme a ella, y garantizar el orden institucional de la República.".
Colegas, los hechos del 25 de septiembre pasado en Iquique nos avergüenzan o, al menos, creo que nos deben avergonzar. No son propios de una sociedad que debe acoger, que debe resguardar la vida, la integridad de todas y todos sus habitantes. Y lo digo aquí como nieta de migrantes.
Creo que tenemos un desafío importante y debemos ser capaces de superar lo ocurrido el 25 de septiembre, respetando a todas y a todos, haciéndonos cargo de nuestros niños, niñas, adolescentes, que vivieron situaciones absolutamente indignas.
Me parece que todos y todas vamos a coincidir en que es necesario encontrar un camino de solución y que nos sentemos a debatir cuál es ese camino, cómo hacemos un reconocimiento al carácter del flujo de las personas que requieren protección internacional; cómo logramos una coordinación integrada de emergencia, que ponga a todas y a todos los actores al servicio de las personas que se encuentran en nuestro país y que requieren albergue y acogida.
Les agradezco el que podamos conversar sobre aquello, y vamos a hacerlo de acuerdo con los tiempos de Incidentes, aumentados obviamente. Vamos a escuchar al Ejecutivo y les daremos la palabra a los distintos Comités, si le parece a la Sala.
)------------(
La señora RINCÓN (Presidenta).-
¿Senador Montes?
El señor MONTES.-
Perdón, Presidenta, pero quiero hacer un pequeño paréntesis y solicitar un breve plazo para presentar indicaciones al proyecto que fija la Ley Marco de Cambio Climático, las cuales fueron concordadas en la Comisión de Hacienda y necesitamos incorporarlas.
Sería un breve plazo.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Entiendo que hay acuerdo unánime en la Comisión para eso y estamos hablando de media hora para que puedan ser ingresadas.
Si le parece a la Sala, así se acordará.
Acordado.
)----------(
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Gracias, colegas.
Perdón por el paréntesis, pero era una formalidad que requeríamos.
Creo que el tema que nos convoca nos conmueve a todas y a todos y nos indigna a todas y a todos. Lo que ha ocurrido el 25 de septiembre obviamente nos avergüenza como país.
En primer término, tiene la palabra el Senador Soria.
El señor SORIA.-
Estimada señora Presidenta, Honorables colegas, saludo a la Mesa del Senado y a los Comités parlamentarios por haber acordado con tanta urgencia la realización de esta sesión especial de Sala para analizar la crisis que se ha producido por la constante llegada de familias de migrantes provenientes de Venezuela y de otras naciones sudamericanas, que buscan en nuestra patria lo que no pueden tener en su país: trabajo, alimento, medicina y seguridad.
Estimados colegas, yo soy un hombre práctico; lo he sido siempre. Donde hay un problema o una diferencia, yo siempre he optado por concentrarme en la búsqueda de soluciones, y si estas soluciones se encuentran en el diálogo y en un amplio consenso entre personas que piensan distinto, tanto mejor, pues así se hace más fácil implementar las soluciones.
En esa línea, me quiero referir a esta crisis social, sanitaria, económica y política generada por el ingreso masivo de migrantes a nuestro país.
Hoy tenemos dos tareas que realizar de la manera más eficaz posible: primero, debemos contener el ingreso irregular y, en segundo lugar, tenemos que brindar una adecuada protección a los derechos esenciales de quienes hayan pasado nuestras fronteras.
En efecto, primero tenemos que lograr que nuestras fronteras sean respetadas. Debemos conseguir que, en lo posible, no se traspase el límite fronterizo de nuestro país a través de vías o pasos no habilitados.
La experiencia ha demostrado que no es posible poner solo carabineros y militares custodiando la frontera, por una razón muy sencilla: no tienen ni la formación ni los medios para contener esos flujos de personas. ¿O es que acaso alguien se imagina siquiera a la policía o a efectivos de las Fuerzas Armadas chilenas abriendo fuego a un grupo de civiles desarmados, con mujeres y niños en sus brazos? Eso no puede pasar.
La contención de estos ingresos ilegales debe producirse interrumpiendo las rutas que emplean estas personas, trabajando con Venezuela, Colombia, Perú y Bolivia, con los cuales hay que concordar un sistema de cooperación a nivel policial, única manera de cortar las rutas migratorias.
En segundo lugar, debemos resolver qué hacemos con las personas que han logrado ingresar al país de manera ilegal. La respuesta es una sola y la dicta el derecho internacional, el derecho que rige la convivencia de los Estados en el mundo. Chile tiene la obligación de brindarles a esas familias un lugar seguro y limpio donde descansar, alimentarse y ser atendidas por personal sanitario, más aún en tiempos de pandemia. Debemos darles atención sanitaria para proteger su salud y la de los chilenos.
Es indispensable contar con un centro de primera atención. Nuestras Fuerzas Armadas y nuestro Sistema Nacional de Emergencias, que coordina la Onemi, tienen los medios para armar un primer campamento para entregar esta asistencia humanitaria.
Posteriormente, estas familias deben ser trasladadas a un centro de atención y estadía temporal, donde puedan permanecer y hacer cuarentenas de rigor en medio de la pandemia. Es en ese centro de estadía donde tendría que realizarse el registro y control estricto de las personas, empezando por su identidad, para detectar la presencia de personas con antecedentes penales, que deben ser apartadas y dispuesta su expulsión por la vía más expedita, y atender las solicitudes de refugio político que se puedan producir.
El gran tema de fondo es qué hacemos con los migrantes económicos, que son personas que han sido desplazadas fruto de la crisis que viven en sus países de origen. Es gente que busca la oportunidad de ganarse la vida trabajando y aportando al desarrollo de nuestro país.
Chile, colegas, es una nación madura y generosa, que tras los horrores que vivimos se ha comprometido con el mundo a promover el respeto de los derechos humanos. Y es por eso por lo que debemos contemplar la forma de integrarlos de la manera más ordenada posible a la vida nacional, dentro de nuestras posibilidades y considerando también nuestras necesidades nacionales. Fundamental será, en este caso, una gestión integral con coordinación de los niveles nacionales, regionales y locales, de manera de lograr una distribución armónica de migrantes a lo largo y ancho del país, evitando, de esta manera, que el ingreso masivo de personas altere indebidamente la vida económica y social de alguna región o comuna de nuestro país.
Señores Senadores, estimadas Senadoras, viví con especial tristeza los acontecimientos del sábado último.
Yo entiendo el malestar de los iquiqueños. Nuestras vidas han sido golpeadas una y otra vez. Primero por el estallido social, luego por la pandemia y finalmente por esta llegada masiva de personas que deambulan por semanas por la ciudad, buscando algo que comer y generando situaciones de convivencia extraordinariamente difíciles en una ciudad ya estresada y aproblemada.
Pero con la misma convicción les digo que no hay estrés ni malestar que justifique en modo alguno el maltratar a otro ser humano y menos hacer una fogata para quemar sus poquitas cosas. Fueron exaltados que no merecen llamarse iquiqueños, porque en mi tierra somos casi todos hijos de la migración. Mi propia familia es una orgullosa mezcla de sangre chilena, peruana e italiana. Y desde hace sesenta años, desde que era el alcalde más joven de Chile, con un poco más de veintidós años, tuve un sueño, que fue hacer de Iquique la ciudad de la integración de América, y la integración no solo de carreteras, puertos o aeropuertos por donde transitan mercaderías. La integración es, sobre todo, el conocimiento, la cooperación y el hermanamiento entre personas, entre seres humanos de distintas nacionalidades, razas y culturas, pero capaces de encontrarse y ponerse a trabajar juntos por un futuro compartido de bienestar y bonanza para sus pueblos.
Por lo señalado, le solicito al Gobierno nacional que se haga cargo de verdad de la situación. Le digo al Presidente, con respeto y por intermedio de sus Ministros de Estado que nos acompañan, que tiene la oportunidad de hacer las cosas bien, de manera que podamos seguir sintiéndonos orgullosos de ser chilenos de corazón.
Con cariño, Jorge Soria.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Gracias, Senador Soria, Senador de la Región, por cierto.
Le damos la palabra a la Senadora Luz Ebensperger, como Senadora de la Región también, en el tiempo del Comité de la UDI.
La señora EBENSPERGER.-
Gracias, Presidenta.
No puedo sino comenzar estas palabras reprobando lo que sucedió al final de la marcha del sábado en la ciudad de Iquique. Esos hechos de violencia no son aceptables; ningún tipo de violencia es aceptable. No podemos validar la violencia. En este ni en ningún caso -repito- se puede validar la violencia en política.
El fenómeno que está viviendo la Región de Tarapacá, en especial, lo hemos venido anunciando ya hace más de un año. Desde junio del año 2020 que, como representantes de la Región de Tarapacá, hemos venido señalando lo que estaba pasando y en lo que podía terminar.
Después de esta marcha, de más de cinco mil personas -nunca había habido una marcha tan grande en la ciudad de Iquique-, se ha tratado muy mal a los iquiqueños, lo que me parece de toda injusticia. Sin embargo -reitero-, rechazo su término.
Presidenta, no existe en Chile una región más multicultural que la de Tarapacá, desde los tiempos del guano, con los chinos, las salitreras, y hoy día con la zona franca. Somos una región que se ha formado producto de la migración, con migrantes que ingresan legalmente a nuestra región a aportar, a trabajar, a mejorar su calidad de vida; que respetan las normas; que se insertan en nuestra sociedad, y que son parte y han sido parte de ella. Gracias a ellos, la región ha crecido.
Esa es la migración de la que siempre Tarapacá ha estado y seguirá estando agradecida.
Pero, desde junio del año 2020, aproximadamente, comenzó un fenómeno que la ciudad no puede seguir aceptando. Esta migración masiva clandestina, que probablemente siempre se produjo -producto de la pandemia, antes se quedaba en la ciudad y luego seguía su camino hacia el sur-, copó los espacios. Es una migración, yo diría, con un aspecto distinto.
Sin duda, entre los migrantes hay gente muy vulnerable que viene de pasarlo mal. Pero, mezclados con ellos, también hay mucha delincuencia, hay crimen organizado detrás. Y están a la vista las evidencias para quienes vivimos en la Región de Tarapacá. No hablo de quienes van de repente a pasear por nuestras regiones. Yo vivo hace más de dieciséis años en la Región de Tarapacá y sigo haciéndolo hasta el día de hoy. Mi casa, mi domicilio, está en Iquique.
Nosotros sabemos lo que ahí se ha vivido día a día desde junio de 2020. Hemos visto cómo todos nuestros espacios públicos, en plena pandemia, han estado copados, sin que se haga nada para resolver el tema de fondo y analizar la situación.
Todo el mundo ve y comenta solamente lo relativo a la migración clandestina y a la vulnerabilidad o no vulnerabilidad de estas personas, pero no se analiza el fenómeno en su contexto. Todos hablan -y, por cierto, hay que hacerlo- de respetar los derechos humanos de estas personas, pero no se analiza -insisto, Presidenta- cómo este fenómeno ha afectado a toda la Región de Tarapacá. Debemos preocuparnos también de ver cómo se respetan los derechos humanos de los tarapaqueños y de los iquiqueños. Todos valen lo mismo; no puede un sector estar por sobre el otro.
Entonces, cuando analicemos un fenómeno como este, veámoslo en su contexto, no por parcelas, no solamente mirando a un sector determinado.
En febrero, Presidenta, se dio a conocer el Plan Colchane. Desde mi punto de vista, era un buen plan. ¿Cuál fue el problema? Que no se cumplió en su totalidad.
El Plan Colchane tenía tres patitas, tres partes: una, la ampliación del decreto N° 265, para que las Fuerzas Armadas tuvieran mayores facultades y pudieran colaborar con Carabineros en el resguardo de la frontera; dos, la contratación de aviones para realizar expulsiones, y, tres, la instalación de albergues.
Hago presente que sí se ha dado una ayuda humanitaria, pero no completa. La primera ayuda humanitaria se otorga cuando estas personas ingresan y se autodenuncian. Ahí se las lleva a una residencia sanitaria, donde están quince días con alojamiento y comida. Pero, al cabo de esos días, estas personas hacen abandono de la residencia sanitaria, y ahí viene el problema, porque quedan en la calle. ¿Dónde? En los espacios públicos.
Los que conocen Iquique saben que es una ciudad pequeña y, por lo tanto, todos los espacios públicos o la gran mayoría de ellos colindan con recintos habitacionales. De ahí que estas ocupaciones en las calles han perjudicado y cambiado la calidad de vida de todos los iquiqueños desde el punto de vista sanitario y también, en una gran mayoría, delincuencial.
Yo no voy a callar la voz en eso: aquí ha habido delincuencia. El día del desalojo en la plaza Brasil, estaban ahí los dos asesinos confesos de los últimos dos crímenes ocurridos hace como tres semanas en mi región. Eran migrantes venezolanos que ingresaron clandestinamente y estaban en esa plaza. Hubo un femicidio frustrado; hubo un intento de abuso de menores, que vivían en un edificio, en fin.
Presidenta, yo podría aquí contar muchas cosas, pero entiendo que tengo que dejarle tiempo al Senador Pilo Durana, quien también vive esta realidad en Arica.
Quiero pedirle al Ejecutivo, frente a lo que hoy día está ocurriendo, que se tomen medidas urgentes. Me gustaría, por ejemplo, que se analizara la posibilidad de decretar un estado de excepción constitucional en Tarapacá o, a lo mejor, en la macrozona norte, pues esto afecta a Arica y Parinacota, a Tarapacá y a Antofagasta. ¿Para qué? Para que las Fuerzas Armadas no digan: "No tenemos atribuciones", y puedan cuidar de verdad las fronteras. Resguardar la frontera en Colchane no es fácil. Por tanto, hay que dotar a quienes tengan los recursos necesarios para que la cuiden fehacientemente.
Aquí no todo es un solo punto. Tenemos que analizar qué ocurre antes de la frontera, qué pasa en la frontera y qué haremos después de la frontera.
En la frontera, yo espero que las Fuerzas Armadas y el Gobierno tengan el control de verdad -sea a través de un estado de excepción o como se estime pertinente- y traten de evitar mayores ingresos o que estos se sigan produciendo.
Antes de la frontera, ojalá el Gobierno -tengo entendido que se está haciendo, pero espero que se impulse con mayor fuerza- contrate lo que se tenga que contratar (abogados, profesionales, lo que sea) para perseguir la trata o el tráfico de migrantes y el crimen organizado que está detrás de todo esto en una gran medida.
Y en Chile, por cierto, Presidenta, se tiene que cumplir la parte del Plan Colchane que no se cumplió, que es lo relativo a instalar albergues. Ahí debieran estar las personas una vez que salgan de la residencia sanitaria, y no en la calle, esperando la resolución final de su situación migratoria.
Lo otro que no puedo dejar de decir es que no podemos regularizar a todos estos migrantes clandestinos. Se debe regularizar a aquellos que corresponda de acuerdo a la ley, como son los casos, particularmente, de reunificación familiar. Si se toma la decisión de regularizarlos a todos, lo único que se va a lograr es un incentivo, una llamada a que sigan viniendo.
Queremos esa buena migración, esa con la cual Chile ha crecido y, particularmente, la Región de Tarapacá. Queremos una migración segura, ordenada y regular para los migrantes, Presidenta, pero también para todos los chilenos, en especial para los tarapaqueños.
Ninguna autoridad del Poder Ejecutivo ni del Judicial -tiene una gran labor aquí y no la ha cumplido hasta ahora- ni del Legislativo puede tirar la toalla de esta manera. Debemos respetar y hacer respetar las leyes para todos, ¡para todos!
Vuelvo a decir que hay que respetar los derechos humanos de todos: de estos migrantes, por cierto, pero también de los chilenos, en particular de los tarapaqueños frente a la grave crisis migratoria, pues, a causa de ello, están viendo afectada su vida diariamente.
Con esa gente hay sesenta y siete campamentos en Tarapacá, ¡sesenta y siete campamentos! Más de 23 mil familias viven en campamentos en una región que no tiene más de 320 mil habitantes. Es un porcentaje muy muy importante.
Hay que resolver los temas.
Los tarapaqueños no entienden algunas normas que existen hace un par de gobiernos atrás: por ejemplo, la que establece que, frente a una vacante en un jardín infantil, en una sala cuna de la Junji o en un colegio público, deba preferirse en la lista de espera al hijo de migrante clandestino por sobre el hijo de un chileno. ¿Cuál es la razón de eso? ¿Por qué?
Igualdad en los derechos para todos es lo que asegura la Constitución, y espero que lo siga estableciendo. Hay que respetar el Estado de derecho, Presidenta.
Ojalá este problema se resuelva, por el bien de los migrantes, para que sean tratados como corresponde, sí; pero también por el bien de los chilenos y de los tarapaqueños.
Gracias, Presidenta.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Gracias, Senadora Ebensperger.
La idea, colegas, es darles la palabra a los invitados y luego, distribuir el tiempo entre los Comités.
El Senador José Miguel Insulza vino a pedirme la palabra como Senador del norte. El problema es que, si se la doy, tendré que dársela también al Senador Durana.
Si les parece, les otorgaremos la palabra a los invitados y, luego, seguimos con los Senadores Insulza y Durana.
El señor INSULZA.-
Está el Ministerio de Relaciones Exteriores también.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Okay.
Entonces, vamos a darles la palabra a nuestros invitados:
al Ministro del Interior, a la representante de la Cancillería, a la Ministra de Desarrollo Social, al Servicio Jesuita a Migrantes y al Director de Asuntos Consulares.
Comenzamos con el Ministro del Interior subrogante, don Juan Francisco Galli.
Ministro, tiene la palabra.
El señor GALLI (Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante).-
Muchas gracias, Presidenta.
Quiero saludar a toda la Sala del Senado y a los Honorables Senadores y Senadoras que están presentes y a quienes están conectados telemáticamente.
La verdad es que coincido plenamente con la exposición que hizo usted inicialmente y con los Senadores que representan a la circunscripción de la Región de Tarapacá.
Creo que hay que darle al fenómeno migratorio una mirada de Estado, que nos permita resguardar los derechos de los ciudadanos, tanto de los chilenos como de los extranjeros que buscan oportunidades en nuestro país.
Para eso, Presidenta, pienso que es importante no perder la perspectiva y saber cuáles son las verdaderas causas del fenómeno migratorio, tanto las mediatas como las inmediatas.
En lo inmediato, creo que tenemos que ser tajantes en rechazar la utilización de la violencia con tintes xenofóbicos por parte de la población en contra de ciudadanos extranjeros. Como Gobierno, hemos sido reiterativos en rechazar y condenar cualquier actitud de violencia o de rechazo en base a discriminación por nacionalidad, raza o cualquier otra razón.
Como país, y especialmente este Gobierno, hemos impulsado una agenda en esta materia. Por eso mismo creemos que es muy relevante que las señales públicas que se den sean consistentes.
Ahora bien, Presidenta, vamos a las razones inmediatas.
En esto quiero ser bastante tajante. Muy bien lo dijo el Senador Soria: aquí hay que enfrentar el problema integralmente, desde las distintas aristas. Y lo señaló acertadamente la Senadora Ebensperger: debemos abordar el problema más allá de nuestras fronteras, en la frontera misma y dentro de nuestro país.
Chile tiene una postura muy clara en esta materia, Presidenta. Desde el inicio de este Gobierno, nosotros dijimos que íbamos a impulsar una agenda para ordenar la casa, porque había un desorden migratorio.
Doy datos: en el año 2017, más de 103 mil ciudadanos haitianos, luego de entrar con un permiso de turismo, se radicaron en nuestro país; y en el año 2018, 188 mil ciudadanos venezolanos se quedaron en nuestro territorio, también después de ingresar como turistas.
Esto generó una agenda de parte del Gobierno que permitió ordenar la casa y retomar la tramitación del proyecto sobre Ley de Migración,
que terminamos aprobando en este Senado con alto consenso y apoyo transversal. Pero, además de eso, Presidenta, adoptamos medidas para evitar que las personas que querían radicarse en nuestro país lo hicieran diciendo que venían como turistas, cuando en realidad buscaban residir en Chile.
Eso tuvo su contrapartida también: iniciamos un proceso extraordinario de regularización migratoria el año 2018, que se vio reiterado con un nuevo proceso luego de que se promulgara la Ley de Migración el 11 de abril de este año. Ello ha significado que más de trescientas cincuenta mil personas, ciudadanos extranjeros que estaban en condición irregular en nuestro país, hayan podido regularizar su situación migratoria. Esa es una muy buena noticia para Chile y para los migrantes.
La regularidad migratoria es un objetivo que creo que es compartido por todas las fuerzas políticas en nuestro país.
La regularidad migratoria permite evitar los efectos que estamos observando en Iquique y lo que habíamos visto durante todo el 2020 y este año en Colchane.
¿Por qué lo digo, Presidenta? Porque, en realidad, el fenómeno que se está dando en la frontera norte tiene que ver con la pandemia. Observamos que los ingresos a nuestro país por pasos no habilitados, los ingresos clandestinos, aumentaron a raíz del cierre absoluto de las fronteras en muchos países latinoamericanos.
Chile también tuvo una postura bastante consistente: cerró sus fronteras, pero se dejó la excepción de los ciudadanos chilenos y extranjeros residentes en nuestro país, quienes podían ingresar y salir, naturalmente. En definitiva, cerramos las fronteras a los que ingresaban como turistas. Por lo tanto, todas aquellas personas que entraban en dicha calidad para radicarse en nuestro país no pudieron ingresar.
Por eso bajó inmensamente el flujo migratorio. Doy los datos: en 2018 ingresaron a Chile 432 mil ciudadanos extranjeros, menos los que salieron; en 2019 fueron 314 mil, y el 2020, durante la pandemia, solo 16 mil personas. Así, Presidenta, usted puede ver cómo se redujo el flujo migratorio a raíz del cierre de fronteras debido a la emergencia sanitaria.
Eso ocasionó que algunas personas igual quisieran ingresar a nuestro país de manera clandestina, por pasos no habilitados, lo cual requería una aproximación en la frontera. ¿Por qué, Presidenta? Lo hemos dicho: porque el ingreso clandestino es peligroso para los propios ciudadanos extranjeros. Lamentablemente, ya doce personas han fallecido en la frontera norte intentando entrar a Chile, probablemente porque desconocen las condiciones extremas en esos lugares.
El segundo riesgo es ser víctimas de redes de tráfico de migrantes, de "coyotes", que les cobran a lo largo de toda Sudamérica para ayudarlos en su tránsito transfronterizo en distintos países. Son redes que lucran con el sufrimiento de aquellas personas.
En tercer lugar, Presidenta, se arriesgan a la aplicación de la ley chilena. Las personas que incumplen gravemente nuestra legislación migratoria, ingresando por pasos no habilitados, están obligadas a someterse a un procedimiento administrativo, que puede terminar con la medida de expulsión.
Por último, quienes logran ingresar a nuestro país -y es lo que vemos en la Región de Tarapacá- quedan en la peor situación de precariedad y en una irregularidad migratoria. Por lo tanto, son sometidos a abusos por parte de quienes informalmente les arriendan lugares para vivir o los contratan, sin quedar sujetos a ningún derecho laboral o previsional.
Por eso, Presidenta, hemos sido tan firmes, enfáticos y reiterativos en la necesidad de desincentivar el ingreso por pasos no habilitados, desincentivar el ingreso clandestino.
Esa es la razón, Presidenta, por la cual hemos tomado esta postura, siempre con pleno respeto a los derechos de las personas. Una muestra de esto es que todas aquellas personas, independiente de cómo hayan ingresado, recibieron atención de salud por el COVID y pudieron hacer su cuarentena durante quince días, al principio de la pandemia, en residencias sanitarias. Seis residencias sanitarias se habilitaron en la Región de Tarapacá, en la ciudad de Iquique. ¿Para qué? Para que las personas que entraron a Chile pudieran hacer su cuarentena y prevenir el riesgo de COVID-19.
No solo eso, Presidenta: apoyamos a los municipios. El Fondo COVID ha significado la transferencia, para hacer frente a la pandemia, de más de 1.800 millones de pesos a la Municipalidad de Iquique y más de 20 millones a la Municipalidad de Colchane.
Ese ha sido el enfoque: independiente de la condición migratoria, primero está la salud de las personas.
Pero, Presidenta, no nos podemos quedar en las causas inmediatas. Creo que en esto hay que ser enfático: la causa de que más de cinco millones seiscientas mil personas se hayan visto obligadas a salir de su país, como son los ciudadanos venezolanos, es la vulneración de derechos en esa nación.
Y, Presidenta, quiero solamente leer el último informe de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, la actualización del informe de 2019, que fue rechazado por el Partido Comunista cuando dio cuenta de las vulneraciones de derechos humanos que sufrían los venezolanos en su país en 2019.
Presidenta, solo quiero citarle...
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Dispone de un minuto adicional para que redondee su intervención, Ministro.
El señor GALLI (Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante).-
Gracias.
Decía, Presidenta, que solo quiero citarle lo que señala el informe de este año de la Alta Comisionada, Michelle Bachelet, sobre Venezuela: "Según cifras oficiales, en 2020, el 56,1 por ciento de las personas con trabajo tenían un empleo formal" -en Venezuela-. "De estos, el análisis de expertos indicó que dos tercios trabajaban en el sector público, donde el ingreso mensual promedio osciló entre dos y cinco dólares estadounidenses". Reitero: el ingreso mensual promedio osciló entre dos y cinco dólares estadounidenses, Presidenta.
La verdad es que lo que hay en esa nación es precariedad máxima, lo cual implica que de ninguna manera se explican las declaraciones del Presidente de la República de Venezuela en que rechaza lo ocurrido en Chile, cuando más bien él debería hacer una autocrítica firme respecto de las políticas de vulneración de derechos de las personas en ese país, que han obligado a más de cinco millones seiscientas mil personas, cinco millones de venezolanos, a salir de Venezuela como consecuencia de la crisis que se vive allí.
Ahora bien, Presidenta, nosotros hicimos un estudio. Muchos de los ciudadanos que llegan a nuestro país no lo hacen directamente desde Venezuela: la mitad de los ciudadanos venezolanos que arriban a Chile han pasado más de diecinueve meses en otros países latinoamericanos, como Perú, Colombia y otros.
Presidenta, Chile representa el tercer país en población venezolana en el mundo, al menos en América.
Por lo tanto, nosotros...
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Ministro, por favor, termine la idea, porque tenemos que escuchar a los otros invitados.
El señor NAVARRO.-
¿Qué va a hacer el Gobierno?
El señor GALLI (Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante).-
Presidenta, muchas gracias.
La verdad es que nuestro enfoque, por lo tanto,...
El señor NAVARRO.-
¡No hay ninguna propuesta! ¿Cuál es la propuesta?
El señor GALLI (Ministro del Interior y Seguridad Pública subrogante).-
... es, fuera de las fronteras, abordar esta situación con los gobiernos de Bolivia y de Perú, como lo hemos hecho, a fin de tomar resguardo en el sentido de que esas personas no lleguen a nuestras fronteras; resguardos en fronteras, fortaleciendo -como se ha hecho y se va a seguir haciendo- la presencia policial y militar. Pero, tal como lo dijo el Senador Soria, espero que ninguno de nosotros esté por el uso de la fuerza para repeler a los ciudadanos que están en esas fronteras, sino por acogerlos, entendiendo el tránsito que han hecho en materia migratoria.
Pero por último, Presidenta, también en Chile hemos de ser claros: si queremos una migración ordenada, segura y regular, la irregularidad migratoria debe tener, en consecuencia, un proceso administrativo que termina, de acuerdo con los antecedentes, en la expulsión.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Gracias, Ministro.
Tiene la palabra la Canciller subrogante, por cinco minutos; y luego la Ministra de Desarrollo Social, por cinco minutos.
Canciller, ¿está conectada?
Si no, le daremos la palabra a la Ministra Rubilar, a quien vemos ahí conectada.
Ministra, tiene la palabra.
La señora RUBILAR (Ministra de Desarrollo Social y Familia).-
Sí.
Muchas gracias, Presidenta.
Tenemos una presentación. ¿No sé si puedo exponerla y compartir pantalla? Está la Subsecretaria de la Niñez conmigo, Blanquita Honorato.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Está habilitada para compartir, Ministra.
La señora RUBILAR (Ministra de Desarrollo Social y Familia).-
Muchas gracias, Presidenta.
Muy buenas tardes a todos y a todas.
En primer lugar, quiero saludarla a usted, y por su intermedio, también a los Honorables Senadores y Senadoras.
Hemos sido invitados desde el punto de vista de nuestro Ministerio de Desarrollo Social y Familia, en particular de la Subsecretaría de la Niñez, a fin de dar a conocer las acciones para el abordaje de la situación de niños, niñas y adolescentes migrantes y sus familias.
Por supuesto, hemos escuchado con atención la preocupación de los Senadores de la región y de todo el Honorable Senado, y obviamente hemos oído al Ministro del Interior subrogante.
Nosotros vamos a completar en este corto tiempo la información sobre los esfuerzos que hemos realizado desde hace varios meses para enfrentar esta situación, que es de alto nivel de complejidad y que nos interesa abordar para así evitar las vulneraciones de los derechos de niños, niñas y adolescentes migrantes.
En tal sentido, tenemos un contexto (el documento respectivo lo vamos a hacer llegar a los Honorables Senadores y Senadoras) de cada una de las regiones que estamos interviniendo mediante un trabajo mancomunado con organizaciones de la sociedad civil, en particular en las Regiones de Arica y Parinacota, de Tarapacá, de Antofagasta y Metropolitana.
Con respecto a la Región de Arica y Parinacota...
Por favor, Subsecretaria, vuelva a la imagen anterior.
Como pueden ver ahí, hacemos una distinción sobre cuál es la población predominante en cada una de las regiones, la cantidad de niños que hay, cuáles son los niños, niñas y adolescentes que están en situación irregular; hacemos una distinción por sexo, por rasgos etarios, niveles educacionales; hacemos un análisis importante en materia de transitoriedad respecto de cuántas de las personas que estamos registrando quieren establecerse en nuestro país, cuántas quieren quedarse en cada una de las regiones y las motivaciones principales que tienen para dejar su nación de origen, donde la gran mayoría se repiten y tiene que ver con mejorar la calidad de vida, conectarse con redes familiares, estudiar y temas tan relevantes como el hambre, y, obviamente, hacemos una distinción de cuántas ingresaron por pasos irregulares y cuántas con niños.
Eso es lo que les vamos a mostrar en estas diapositivas.
La que se ve en pantalla es la de Arica y Parinacota.
En seguida, tenemos a la Región de Tarapacá, que probablemente es el fuerte de la discusión hoy día. Está ahí, efectivamente, como país de origen Venezuela principalmente.
La siguiente es la Región de Antofagasta, donde también la principal población migrante es venezolana.
Luego se halla la Región Metropolitana, donde ahí ya tenemos una variedad de otras nacionalidades, como Haití, República Dominicana, Colombia y Venezuela.
Nosotros vamos a hacer llegar esta información, pero es para que se sepa que en el trabajo mancomunado hemos hecho un levantamiento con diferentes instituciones, desde la Seremía, por supuesto, de nuestro Ministerio, del Programa Calle, como también de la Subsecretaría de Servicios Sociales, World Vision y otras instituciones de la sociedad civil que nos han ayudado, como el estudio de la Universidad Católica.
Este trabajo, que ya llevamos hace variados meses, ha tenido una dimensión territorial importante, Presidenta. Hemos hecho estos diagnósticos regionales -se los comentaba anteriormente-, y hemos generado coordinaciones con las intendencias anteriores (por cierto, vamos a hacer una coordinación con las gobernaciones), las seremías, los municipios, la Defensoría de la Niñez (a la que le agradecemos su trabajo mancomunado), Naciones Unidas, Unicef, OIM, Acnur, organizaciones de la sociedad civil como el Servicio Jesuita a Migrantes, entre otros.
¿Qué hemos hecho?
Hemos entregado apoyo de materiales e insumos en residencias sanitarias, residencias del Sename, y también hemos aumentado los cupos en los diferentes albergues para las familias, en particular con niños, niñas y adolescentes.
Asimismo, hemos generado coordinación con el Sename a través de las OPD, residencias y programas para la protección especializada de niños, niñas y adolescentes.
Además, hemos hecho un trabajo de coordinación con los tribunales de familia. Al respecto, quiero comentarles que hace muy poco, hace dos días, en la Región de Tarapacá juezas de familia fueron a ver los albergues en los que habíamos aumentado cupos para los niños y niñas migrantes, y recibimos una muy buena retroalimentación respecto de la infraestructura que fueron a visitar. Esto, enfocado en procesos de reunificación familiar, medidas de protección, etcétera.
Y hemos priorizado en ayudas sociales. Por ejemplo, destacamos en particular el trabajo de la sociedad civil a través de la iniciativa Locales Conectados; entrega de pañales, cajas de mercaderías, elementos de protección personal y otros.
La señora RINCÓN (Presidenta).-
Ministra, necesitamos que acote su presentación.
Puede continuar.
La señora RUBILAR (Ministra de Desarrollo Social y Familia).-
Voy a pasar, entonces, un poquito más rápido la exposición. Pensé que tenía cinco minutos.
Quiero contarles que el Subsistema Crece Contigo también está aplicado en particular a las madres sin RUT y niños y niñas sin RUN. Ahí está desplegado el número de niños que hemos ido atendiendo a través del Subsistema.