Presos adultos mayores con enfermedades graves: discuten alcance de tratados internacionales y delitos de lesa humanidad
Senadores Prokurica, Allamand, Larraín se mostraron partidarios de cumplir los derechos que garantizan los tratados internacionales respecto a todos los condenados; mientras que senadores De Urresti y Navarro abogaron por los matices valóricos en el caso de condenados por casos de derechos humanos
13 de diciembre de 2016
Coincidiendo en la necesidad de realizar un debate profundo sobre la situación de los presos adultos mayores que cumplen condenas y que están en una situación de gravedad física y síquica senadores expresaron sus distintas visiones sobre esta materia.
El presidente de la Comisión de Defensa, senador Baldo Prokurica, realizó un llamado al gobierno, a "tener en claro las sanciones internacionales a las que se expone nuestro país, al mantener internos que sufren enfermedades terminales en recintos penitenciarios, y en particular, con aquellas personas –en dicha condición-, que cumplen condena en Punta Peuco".
Según expuso “el 31 de mayo del presente año, solicité a Gendarmería, que se informara sobre las personas de libertad recluidas que se encuentran actualmente con enfermedades catastróficas (terminales) y con alzhéimer".
De igual forma, informó el envío de un oficio al Instituto de Derechos Humanos (INDH), para que dicho organismo, pueda pronunciarse en general de todas las personas con enfermedades terminales en las cárceles de Chile y en particular con las personas que cumplen condena en Punta Peuco, bajo la revisión de los convenios, tratados, declaraciones y resoluciones que Chile ha suscrito y ratificado, los cuales debe de cumplir en materia de Derechos Humanos y Derechos Humanos.
En tanto, el senador Alejandro Navarro presidente de la Comisión de Derechos Humanos señaló que "este no es un problema de solución judicial sino valórico. Los familiares de detenidos desaparecidos se oponen a que haya este tipo de concesiones a quienes asesinaron o torturaron a sus seres queridos".
Agregó que "es cierto que algunos condenados están en situación física o sicológica de gran deterioro y, si la Corte Suprema va a sentar jurisprudencia es un dictamen que hoy día el Congreso no está en condiciones de cuestionar salvo una ley que inhabilite cualquier tipo de concesión a personas condenas por delitos de derechos humanos". Agregó que "mi temor es que si no existe una solución en consenso con la sociedad civil se reabran las heridas y la sociedad chilena no deje atrás momentos tan dolorosos".
En tanto, el senador Andrés Allamand, valoró el enfoque que ha puesto sobre la materia el ministro de Justicia, porque existe una jurisprudencia clara sobre los temas de derechos humanos y humanitarios para personas de edad avanzada en el derecho internacional. "Hoy existen personas privadas de libertad que enfrentan una situación compleja y espero que el ministro no se quede solo en declaraciones sino que tenga iniciativa".
Una opinión distinta expresó el senador Alfonso De Urresti, integrante de la Comisión de Constitución, quien explicó que "nunca voy a eludir el debate y tampoco persigo venganza pero creo que en la justicia. Entonces más que debatir sobre los beneficios tenemos que hacer un debate sobre la naturaleza de los delitos cometidos se trata de gente que ha sido condenada por delitos y crímenes horrorosos y me duele como chileno que no hemos visto ningún arrepentimiento ni piedad".
Entonces, "pongamos en la justa balanza considerando que se trata de personas condenadas por procesos y que han dilatado enormemente la justicia y creo que en el caso de crímenes de lesa humanidad no corresponden estos beneficios".
Por su parte, el senador Antonio Horvath recalcó que los derechos humano son válidas para todas las personas incluyendo a las privadas de libertad y, en el caso de personas que están con enfermedades terminales es positivo que se hagan cargo sus familiares, en lugar que el Estado esté respondiendo". "Creo que se trata de una discusión valiosa y en nuestra sociedad junto con justicia y reparación también se requiere dar vuelta la página y mirar al futuro".
El senador Hernán Larraín, quien también integra la Comisión de Constitución destacó las intervenciones que han tenido en el último tiempo, diversas autoridades y personas de mucha altura moral, e incluso también en el Senado hay un proyecto de acuerdo en virtud del cual se pide que -por consideraciones humanitarias que están contenidas en el derecho internacional- cuando hay un preso o una persona que sufre una enfermedad grave puedan cumplir con arresto domiciliario en lugar de están en la cárcel". "No se trata de indultar sino que cumplan de manera adecuada a su edad y enfermedades", dijo.