Cobro del uso de la línea de crédito: contundente apoyo a moción que busca cambiar práctica bancaria

Considerando que se calcula que a un cliente promedio de una cuenta corriente, se le generan mensualmente unos 18 mil pesos por concepto de intereses, lo que equivale en un año a 261 mil pesos y fracción, la Sala le dio un cerrado y unánime respaldo al proyecto de ley que regula las formas de pago de los sobregiros de las cuentas corrientes bancarias.

Durante el debate se resaltó la iniciativa impulsada por el senador Juan Antonio Coloma y que ahora deberá ser analizada, en segundo trámite constitucional, por la Cámara de Diputados.  

Así se avanza para que el pago de los sobregiros de las cuentas corrientes bancarias sea automático, con los primeros abonos que se hagan a la cuenta corriente correspondiente.

Asimismo, se establece que los clientes también podrán abonar directamente a la línea de crédito a través de pagos realizados por caja en las sucursales del banco que corresponda. No obstante, se contempla la posibilidad que el cliente cuentacorrentista pueda solicitar de manera expresa y voluntaria que no se realicen abonos automáticos a su línea de crédito.

Con todo, la Sala, además acordó cambiar la palabra “solicitar” por “instruir”, a solicitud del senador Rodrigo Galilea, para que “De manera expresa y voluntaria, el comitente podrá “instruir” al Banco que el pago del crédito que se haya estipulado para su cuenta corriente bancaria no se realice de manera automática, en cuyo caso el pago se realizará mediante los mecanismos señalados en el inciso anterior”

El senador Juan Antonio Coloma remarcó que la moción tiene un carácter “relevante y ciudadano”, de gran importancia considerando que hoy existen 4 millones 500 mil cuentas corrientes, “de las cuales el 90% tiene asociada una línea de sobre giro y de ese porcentaje, un 50% hace uso efectivo de esta línea”. Para el legislador, “esta ley pretende generar la automaticidad del pago” y dejó constancia que hay algunos bancos que ya cuentan con esta modalidad.

El proyecto “va directo al bolsillo de los cuentacorrentista”, destacó el senador José García Ruminot; aquí, añadió, “se busca generalizar esta práctica que ya tienen algunos bancos y que favorece al cliente y beneficia a la ciudadanía”.  Postura similar evidenció el senador David Sandoval, quien junto con felicitar a los autores, recalcó que se “hace cargo de una realidad que afecta a miles de chilenos”.

Luego, la senadora Isabel Allende coincidió en que se está frente a un proyecto “muy sencillo, pero absolutamente real” y recordó que hace años atrás “hice una campaña por el abuso que había por la obligación de asociar una cuenta corriente a un crédito hipotecario”. En tanto, el senador Ricardo Lagos Weber, valoró que aquí se establece “un mínimo de justicia” y evidenció que “podría haber espacio para ver el tema de los intereses en Chile”.

“Son de esas ideas que tienen un sentido muy práctico y abaratan el costo financiero para cualquier cuentacorrentista que en algún momento debe acudir a las líneas de créditos”, señaló el senador Jorge Pizarro, quien además, valoró que se avanza en transparencia. En tanto, el senador Carlos Montes adelantó que “el tema bancario es algo que alguna vez debemos discutir, es claro que hay un conjunto de cosas pequeñas que le reportan utilidad a los bancos y esta es una de ellas y no son justificadas”.

A su turno, el senador Kenneth Pugh detalló que “los bancos trabajan con sistemas transaccionales, instantáneos, por lo que el valor del dinero es fundamental y se debe asegurar a las personas este valor”.

Valorando el origen ciudadano de este tipo de iniciativas, el senador Juan Pablo Letelier rescató que la legislación también se “alimente, muchas veces, escuchando a las personas que representamos”. Por último, el senador Alejandro García Huidobro evidenció que aquí “no solamente hay pago de intereses, también hay pago de impuestos, por la ley de timbres y estampillas”, por lo que sobresalió la importancia de la moción.