Avanza ley integral de las personas adultas mayores y de promoción del envejecimiento positivo
Durante el debate, senadoras y senadores destacaron los principales aspectos del texto legal, enfatizando la creación de una modalidad de trabajo flexible para adultos mayores. El proyecto recibirá indicaciones hasta el martes 5 de mayo.
28 de marzo de 2022Promover el envejecimiento positivo, el cuidado integral de las personas mayores, el fortalecimiento de la institucionalidad del Servicio Nacional del Adulto Mayor y crear una modalidad de trabajo flexible para adultos mayores, son los principales ejes del proyecto recientemente aprobado en general por el Senado (42 votos a favor y 1 en contra), texto que recibirá indicaciones hasta el martes 5 de mayo.
Cabe recordar que el proyecto -en primer trámite constitucional y analizado latamente por la Comisión Especial del Adulto Mayor y la Comisión de Hacienda- responde a un mensaje y a mociones refundidas presentadas por los senadores Ximena Órdenes, Francisco Chahuán, y David Sandoval, y de los ex senadores Carolina Goic y Rabindranath Quinteros (Boletines 12.451-13, 12.452-13 y 13.822-07).
Durante la sesión, la senadora Fabiola Campillai solicitó que el texto fuera analizado en particular, además, por la Comisión de Derechos Humanos; sin embargo la petición no obtuvo la unanimidad de la Sala.
Con todo, los legisladores valoraron los avances y destacaron la creación de una modalidad de trabajo flexible para adultos mayores y llamaron a reconocer y respetar los aportes y experiencias de la cuarta edad.
“El 15% de la población es adulto mayor y a los ojos del Estado se encontraban invisibilizadas. Con este proyecto nos ponemos al día… y para que todo se concrete el proyecto debe convertirse en ley”.
“Mi voto es en contra, porque pienso que esto debe pasar primero por la Comisión de DDHH y allí debe recibirse a organizaciones para presentar indicaciones. Se generaliza a las personas por su edad y no se toman en cuenta las enfermedades ni el sexo de cada cual”.
“Hoy se estima los adultos mayores ya suman más de 6 millones de personas. Somos poco menos de un tercio de la población y, sin embargo, vivimos y se nos trata en condiciones impropias. La vejez, que es parte natural de la vida, va asociada generalmente a la pobreza y la enfermedad”.
“Hoy estamos enfrentados a una realidad social y demográfica que nos impone enfrentar demandas, desafíos y anhelos de los adultos mayores. (…) El progresivo avance del envejecimiento no debe ser visto como un problema, sino como una oportunidad”.
“Este proyecto perfecciona en muchos aspectos la actual política en distintos temas, con mecanismos de participación ciudadana (…) Ha habido algunas críticas, como la falta de la defensoría del adulto mayor o que el informe financiero solo tiene gasto marginal (…); sin embargo, es importante aprobar en general, a la espera la opinión del Ejecutivo”.
“Al 2050 se duplicará la población adulto mayor, por lo que es una tarea importante para las políticas públicas que desarrollara el Estado. Es importante aprobar en general para conocer la opinión de Ejecutivo y que se abra un plazo de indicaciones que permita mejorar el debate que ya realizamos en la Comisión Especial del Adulto Mayor”.
“Todos tenemos la esperanza que sea ley en el más breve plazo posible (…), pero también tenemos que considerar que existen agrupaciones de la tercera edad que están en contra de este proyecto, manifestando que no se consideraron las observaciones que hizo la sociedad civil y que no se ajusta a los convenios internacionales”.
“Es una excelente iniciativa y creo importante mencionar algunos avances. En los últimos 4 años se aumentó el número de centros diurnos, de 16 a 115 (…), más comunas amigables, aumentaron los montos de pensiones (…) Aquí tenemos una buena oportunidad de construir un país más justo”.
“He escuchado puras cosas positivas del proyecto, pero tengo que llevarlo a un sentido de realidad (…) Cuando hablo de envejecimiento positivo, siento que lo positivo es no tener dependencia y la única forma de no tenerla es tener una pensión como corresponde. Apelo a eso”.
“Hoy hay 600 mil adultos mayores que no tienen contrato de trabajo, con serio riesgo de tener un accidente y estaban en completa desprotección y este proyecto buscaba crear una jornada especial y contrato especial para el adulto mayor. Nuestra pirámide demográfica se está envejeciendo, por eso la importancia de focalizar”.
“Hay un inmenso espacio de acción en que las políticas públicas no han estado a la altura, son temas de la modernidad, esta capacidad de la longevidad. (…) Hay una realidad de la cual tenemos que hacernos cargo como política pública de una forma distinta”.
“Siempre los jóvenes van a aprender muchísimo de quienes tienen la experiencia de la vida. La importancia de las personas mayores y el respeto que le debemos a quienes dieron una vida a construir democracia y una República libre”.
“Cuando fueron jóvenes lo dieron todo, se las jugaron por buscar un futuro… y todo eso de pronto se tambalea, y a veces se desmorona, en el momento mismo en que una persona se jubila, el nivel de ingreso cae en el mismo momento en el que se jubila y en el que también la maquinaria personal se deteriora”.
“No se trata solo de mejorar las pensiones, que obvio es fundamental y avanzamos con la PGU, pero no es suficiente porque la calidad de vida tiene que ver con salud, transporte, cómo generamos un cambio cultural para recuperar el respecto que existía hace antaño”.
El texto fortalece la institucionalidad relacionada con la autonomía, independencia y cuidado de las personas adultas mayores, precisando los deberes generales del Estado y sus organismos.
Dispone que en las acciones y medidas que se adopten en materia de apoyos y cuidados de la persona adulto mayor, los órganos de la Administración del Estado y todas aquellas entidades privadas colaboradoras del Estado, deberán considerar un enfoque comunitario y socio-sanitario, que aborde tanto las necesidades sociales como de salud del adulto mayor, sea que se ejecuten directamente o a través de alianzas público-privadas.
Define las líneas de acción mínimas que el Estado deberá desarrollar, para la promoción del envejecimiento positivo y el apoyo y cuidado integral de los adultos mayores.
Además, contempla la elaboración y ejecución de programas laborales específicos para conceder a las personas mayores la posibilidad de realizar una actividad productiva adecuada a sus capacidades respetando su vocación o deseos.; como así mismo, los programas de capacitación y perfeccionamiento que acompañen sus competencias.
Crea el “Sistema de Ciudades Amigables con las Personas Adultas Mayores” y los Consejos Asesores Regionales de Personas Adultas Mayores,.
Establece normas especiales respecto de la contratación de personas adultas mayores, pudiendo regirse por éstas el contrato individual que el trabajador adulto mayor celebre con el empleador.